Cuando nos despertamos cada mañana
se tiene que encender en el corazón,
con esa alegría que surge del alma
para afrontar el día con total decisión.
Pues ella, debe ser el estado
en el cual nuestro espíritu navegue,
por el bravío mar de la vida para sortear
cada problema cuando se presenten.
Así nuestra existencia debe ser
un himno a la alegría,
ya que cada cosa que encaremos
lo tenemos que hacer
siempre con una sonrisa.
Pero no hablo de esa sonrisa que se ve
a flor de labios sino de la sonrisa permanente
que tenemos que tener en el corazón,
para enaltecer al himno de la alegría
como lo hace la naturaleza,
brindándole su belleza a cada flor.
Es todo tan bello cuando la alegría
recorre nuestro interior, que si logramos que ella
siempre nos acompañe sin duda,
todo será mucho mejor.
Por ello, este himno a la alegría
quiero dar a conocer,
para que así cada corazón se predisponga
y lo disfrute con total placer.
ADOLFO FREITAS
se tiene que encender en el corazón,
con esa alegría que surge del alma
para afrontar el día con total decisión.
Pues ella, debe ser el estado
en el cual nuestro espíritu navegue,
por el bravío mar de la vida para sortear
cada problema cuando se presenten.
Así nuestra existencia debe ser
un himno a la alegría,
ya que cada cosa que encaremos
lo tenemos que hacer
siempre con una sonrisa.
Pero no hablo de esa sonrisa que se ve
a flor de labios sino de la sonrisa permanente
que tenemos que tener en el corazón,
para enaltecer al himno de la alegría
como lo hace la naturaleza,
brindándole su belleza a cada flor.
Es todo tan bello cuando la alegría
recorre nuestro interior, que si logramos que ella
siempre nos acompañe sin duda,
todo será mucho mejor.
Por ello, este himno a la alegría
quiero dar a conocer,
para que así cada corazón se predisponga
y lo disfrute con total placer.
ADOLFO FREITAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dejanos tus comentarios: